No le gustaba el Pozol; Padre del niño descarta muerte por esta bebida; comerciantes de Huax-Pix advierten manifestaciones si SESA mantiene prohibición

Chetumal.- Mario Espinoza Pérez, padre del menor que falleció el 10 de Agosto en el Hospital General de esta ciudad por gastroenteritis aguda, descartó contundentemente que su vástago haya muerto por tomar Pozol, pues ésta bebida ni si quiera era del gusto del niño, reveló que el personal de Salud tomó muestras de un Pozol descompuesto que no era para consumo humano y consideró que la muerte fue por contacto con agua contaminada; por su parte, comerciantes de Huax-Pix, la comunidad natal del infante, advirtieron manifestaciones si SESA mantiene la prohibición del Producto, pues sostienen que éste no es peligroso para el consumo humano.

Espinoza Pérez sostuvo que su hijo no era asiduo al Pozol porque no le gustaba esta bebida, al tiempo que dijo tener sospechas de que el deceso del niño tiene conexión con que se metió a nadar a un ojo de agua de la localidad de Huax-Pix, mismo que tenía un muy mal aspecto luego de las lluvias y escurrimientos que se produjeron en esos días, por lo que piensa que el menor debió infectarse de alguna forma.

Descartó terminantemente que su hijo haya muerto por tomar pozol.

Mostró el certificado de defunción que dictamina muerte por gastroenteritis aguda. Y denunció que la conclusión de la Secretaría de Salud está basada en una muestra que su personal tomó de un residuo de Pozol descompuesto que no era para consumo humano, mismo que había sido preparado dos días antes.

Aclaró que al momento de tomar las muestras, advirtió al personal de Salud que los residuos estaban echados a perder, pero hicieron caso omiso y fue días después cuando el Sector Salud decretó la prohibición del Pozol, debido a la bacteria E. Colli que habría sido encontrada en el residuo.

En tanto, Mariano Espinosa Pérez hizo un llamado a las autoridades de Salud para que digan la verdad en torno a la muerte de su hijo y que no aumenten su sufrimiento, al divulgar que él fue el causante de su fallecimiento, o que se debió al consumo del Pozol.

Por su parte, Manuela García López, representante de los vendedores ambulantes de Pozol en Huay Pix, lugar en el que vivía el niño, estableció que la prohibición impuesta por SESA ya afectó de forma directa la economía de 50 familias dedicadas a la venta de esta bebida.

Este producto se vende en la orilla de la carretera Federal, en el interior de la localidad y en la zona turística, pero desde la prohibición las ventas han parado y la afectación es para más de 100 personas.

Acompañada de un agrupo de vendedores de Pozol, advirtió que si SESA no dice la verdad en torno al Pozol, pues ellos, al igual que el padre del menor, descartan que esta bebida haya causado la muerte del niño, realizarán manifestaciones para que Salud levante la prohibición.

No descartaron bloquear la carretera.

García López aclaró que no se oponen a la regularización e inspección de la Secretaría de Salud, pero sí a la prohibición de la comercialización del Pozol, pues reiteraron que ésta no es una bebida peligrosa para el consumo humano.