Caos en el Zoo; animales moribundos comen desperdicios en el “Biouniverzoo” de Chetumal; especies escapan de sus espacios ante endebles jaulas; cocodrilo deambula por el parque

Chetumal.- Animales moribundos semi-alimentados con desperdicios de centros comerciales y jaulas de las que escapan diversas especies, son las condiciones en las que se encuentran los habitantes del zoológico de esta ciudad; incluso hace unos días, pecaríes deambulaban fuera de su espacio, mientras un cocodrilo se había fugado, mención a parte el vidrio ya cuarteado que separa el hábitat de los lagartos, del público, así lo dio a conocer este lunes, Daniel Baruch Lucero, director de ese centro de conservación animal.

El Zoológico Payo Obispo, el cual intentó convertirse en el parque temático “Biouniverzoo”, hoy se encuentra prácticamente agonizando, pues el descuido de los últimos gobiernos municipales incluyendo al actual, ha provocado que este lugar -que alguna vez fue el orgullo de los chetumaleños-, ahora sea parte de una obra incompleta, un sitio abandonado con muchas carencias para funcionar y con un lote de animales moribundos, siendo la falta de recursos económicos y de personal, los principales problemas.

El fraude millonario con el nombre parque temático “Biouniverzoo”, fue anunciado e iniciado por el ex presidente municipal, Andrés Ruiz Morcillo, y el ex gobernador del Estado, Félix Gonzáles Canto, y actualmente las obras continúan inclusas en su segunda fase, debido a las crisis por la que atraviesa el gobierno municipal de Carlos Mario Villanueva Tenorio.  

De acuerdo a Daniel Baruch Lucero, director del Zoológico Payo Obispo, la segunda fase inconclusa de tres que estaban proyectadas, actualmente presenta instalaciones deterioradas, irregularidades desde su construcción, que no fueron corregidas por la empresa, y otras problemáticas que han limitado el funcionamiento del parque.

“Este zoológico, lo que fue el Biouniverzoo, está en una segunda etapa inconclusa de tres, pero bueno, para el zoológico en sí, es lamentablemente que se presente esta situación, esta administración no pudo bajar los recursos necesarios, porque estaríamos hablando de millones de pesos para continuar con la segunda etapa y soñar con empezar una tercera”.

El recorte de personal y un presupuesto de 10 mil pesos semanales, que terminan siendo entregados cada 15 días para la alimentación de los animales, han puesto en riesgo la salud de las especies.

Incluso el director del zoológico reconoció que los desperdicios de los supermercados son solicitados para alimentar a los animales, aunque la justificación es que se escogen los de mejor estado.

“La verdad que la tarea no es fácil, los recursos son más limitados, sí nos están haciendo que llegan muy despacio los recursos y eso genera cierto atraso administrativo, vamos por un recurso una semana, por otro recurso la otra semana en fin, semanalmente nos están dando 10 mil pesos  y está llegando cada 15 o 12 días”.

 El retraso en la liberación de recursos ha generado una deuda a los proveedores y limitado la operación y mantenimiento del parque, el cual presenta diversas carencias, sobre todo en la infraestructura, lo que ha ocasionado que todos los días se escapen animales de sus jaulas.

Incluso, la semana pasada según por un descuido del personal, se escapó un cocodrilo, mientras que en estos días los pecaríes han sido los fugitivos, aunque actualmente no hay dinero para la reparación y reforzamiento de las jaulas.

“Manejar un recurso así no nos permite soñar en destinar recursos para hacer alguna reparación, porque todo lo que llega es para pagar alimentos del día, o pago de facturas de la semana pasada, lamentablemente tenemos infraestructura que tiene 37 años y hay parte que tiene una remodelación desde hace 15 años y pues no está en óptimas condiciones, lo que haremos es parchar algunas partes para hacer una entrega lo más sana posible”.

Inclusive el refugio donde habita el cocodrilo que cuenta con partes de cristal como barrera para que pueda ser visto por los visitantes, ya sufrió diversas cuarteaduras que podrían abrir el estanque.

La falta de dinero para la manutención de este parque se vio reflejada en su máxima expresión en los últimos años, sobre todo en esta administración, donde salió a relucir que han muerto cerca de 40 ejemplares que había dejado la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente .