Deserción escolar: Alumnos de comunidades rurales sin apoyo de la SEyC

Chetumal.- La Secretaría de Educación y Cultura de Quintana Roo está excluyendo a los alumnos de comunidades rurales del programa de becas y estímulos educativos, situación que está provocando la deserción escolar, a pesar de su titular, Marisol Alamilla Betancourt, anunció acciones prioritarias para contrarrestar esta problemática.

María Juana Hernández, habitante de la rivera del Rio Hondo, señaló que a pesar de los anuncios con bombo y platillo que realiza la SEyC, de inclusión y apoyo a los que menos tienen, la realidad es que los jóvenes tienen que abandonar sus estudios debido a que sus padres no pueden costear su educación.

“Sí hacen falta porque la verdad no alcanza, el dinero cada vez es más difícil obtenerlo y los estudios cada vez más caros, pues aquí no hay trabajo, nomás lo dicen muy bonito, lo hablan allá y a la mera hora aquí no llega, es lo mismo, no tenemos ni trabajo, no tenemos nada, lo que queremos es tener un trabajo pero no lo hay y por eso los jóvenes abandonan la escuela y buscan la forma para sobrevivir y apoyar a la familia”.

La madre de familia aseguró que gobiernos llegan y gobiernos se van y jamás han sido tomados en cuenta, propiciando que cientos de jóvenes en la rivera del Rio Hondo tengan que dejar sus estudios para buscar un empleo como cortador de caña o migrar hacia los Estados Unidos para poder aportar al gasto familiar.

“No da para nada el dinero, cuánto no gastamos diario para dos meses todo está caro, yo no más salgo a la calle a comprar 200 pesos sólo traigo como 6 cositas, además, más a parte el gasto de mi hija, son 30 pesos de mi hija diarios y a veces copias, a veces son tareas, material y no alcanza, por eso muchos sacan a sus hijos de la escuela y los ponen a trabajar”.

Dijo que es lamentable que se gasten millones de pesos en publicitar los programas de becas cuando en la realidad miles de alumnos en situación precaria no pueden acceder a estos apoyos.

Finamente, comentó que la educación se ha vuelto cara y un negocio para muchos, puesto que los discursos de educación gratuita no van acorde a la realidad.