Nadie lo respeta: Remberto incapaz de garantizar seguridad pública de los cancunenses

Expedientes X 28 septiembre 2017.- Ya nadie lo respeta, ¿qué nos espera?... El robo al DIF-Cancún es una muestra muy clara que la delincuencia no teme a Remberto Estrada ni a su Policía, ni a su Gobierno, ni a nada que se precie de ser una Autoridad. El golpe al DIF no sólo es una afrenta contra el omiso alcalde de Benito Juárez. Es más bien un aviso para los cancunenses: ya estamos entrando a un proceso de ingobernabilidad. Remberto ya no garantiza la Seguridad Pública de los cancunenses. Ni siquiera es capaz de garantizar la seguridad de las instituciones que dirige...

Hace apenas 48 horas la tropa le estampó en la cara a Remberto la realidad de la Policía de Cancún. Su Policía. Sólo 12 patrullas sirven. Sólo 110 policías andan en las calles, de un supuesto total de 1,900 elementos que quién sabe “dónde andan”.

Tampoco hay equipo indispensable como chalecos, uniformes y armas. Tampoco hay sueldos a tiempo, remuneraciones justas y conforme al trabajo que desempeñan y hay de parte de Remberto, un mal uso de los recursos federales asignados a la Seguridad Pública, esto último dicho de propia voz de los policías de Cancún.

Pero hay algo que no hay tampoco en la Policía de Cancún y que es lo peor de toda esta situación. No hay liderazgo. El titular de Seguridad Pública ni siquiera es reconocido por la tropa. Y en definitiva Remberto no es un líder. No para sus policías. Tampoco para su gabinete. Nadie lo respeta. En el Ayuntamiento cada quien cuida sus intereses personales.

El robo de hoy al DIF-Cancún es una burla a las autoridades del municipio. Se trata nada más ni menos que de la nómina de los trabajadores municipales. O sea, Remberto ya no es capaz ni siquiera de garantizar el sueldo de sus empleados porque -ahora se ve-, alguien se lo puede robar en el camino.

Y otro tema es el traslado del dinero en efectivo. ¿Por qué se paga la nómina en efectivo? ¿No debería ser a través de una tarjeta bancaria? Bueno, Usted puede sacar sus propias conclusiones.

En fin que, si la delincuencia ya le roba al Ayuntamiento de Benito Juárez que es la máxima autoridad de Cancún, ¿qué podemos esperar el resto de los cancunenses?