"Sunami de Delincuencia en Cancún", acusa el Obispo Pedro Pablo Elizondo
Por:
Expediente Quintana Roo
Publicado:
Cancún.- Pedro Pablo Elizondo —Obispo de Quintana Roo— calificó como “un tsunami de delincuencia” la ascendente actividad delictiva en Cancún, y afirmó que los delincuentes ya están llegando a las iglesias del estado para exigirles dinero.
Las declaraciones del prelado se produjeron este domingo al término de su tradicional homilía en la Catedral de Cancún.
“¡A nosotros ya nos llegó a nuestra casa… a nuestras iglesias nos está llegando! Descaradamente seis o siete delincuentes, sin capucha ni nada, y órale, saquen el dinero, saquen las carteras. ¡En pleno día y no pasa nada! Porque hay que darles abrazos, porque son seres humanos, porque también son pueblo sabio y bueno”, expresó al criticar la política de seguridad del Gobierno de la República.
Continuó:
“¿Qué nos espera con toda esta avalancha, con este tsunami de delincuencia que nadie lo quiere frenar y lo dejan crecer y crecer? ¿A ver quién le pone ‘cascabel al gato’?”.
Y remató:
“Todo mundo está consternado (por la inseguridad) menos el presidente y la futura presidenta. ¡No estamos bien! Y ella (Sheinbaum) no está de acuerdo y no va a cambiar la estrategia de abrazos, no balazos. ¿Qué nos espera? Más de lo mismo, incremento de delitos de todo tipo”.
El obispo también lanzó un reclamo a las autoridades locales por el reciente ataque a mano armada en la casa de los sacerdotes ubicada en la Av Bonampak de esta ciudad.
Cancún.- Pedro Pablo Elizondo —Obispo de Quintana Roo— calificó como “un tsunami de delincuencia” la ascendente actividad delictiva en Cancún, y afirmó que los delincuentes ya están llegando a las iglesias del estado para exigirles dinero.
Las declaraciones del prelado se produjeron este domingo al término de su tradicional homilía en la Catedral de Cancún.
“¡A nosotros ya nos llegó a nuestra casa… a nuestras iglesias nos está llegando! Descaradamente seis o siete delincuentes, sin capucha ni nada, y órale, saquen el dinero, saquen las carteras. ¡En pleno día y no pasa nada! Porque hay que darles abrazos, porque son seres humanos, porque también son pueblo sabio y bueno”, expresó al criticar la política de seguridad del Gobierno de la República.
Continuó:
“¿Qué nos espera con toda esta avalancha, con este tsunami de delincuencia que nadie lo quiere frenar y lo dejan crecer y crecer? ¿A ver quién le pone ‘cascabel al gato’?”.
Y remató:
“Todo mundo está consternado (por la inseguridad) menos el presidente y la futura presidenta. ¡No estamos bien! Y ella (Sheinbaum) no está de acuerdo y no va a cambiar la estrategia de abrazos, no balazos. ¿Qué nos espera? Más de lo mismo, incremento de delitos de todo tipo”.
El obispo también lanzó un reclamo a las autoridades locales por el reciente ataque a mano armada en la casa de los sacerdotes ubicada en la Av Bonampak de esta ciudad.
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