Estefanía Mercado utiliza caso sensible para autopromoción en boletín oficial de Comunicación Social del Ayuntamiento de Playa del Carmen
El comunicado, titulado “Estefanía Mercado responde con hechos: rescatan a mujer joven víctima de secuestro en Playa del Carmen”, pone el nombre de la presidenta como eje central.
Por: Esmaragdo Camaz
Playa del Carmen.- Un boletín oficial emitido y distribuido por la Dirección de Comunicación Social del Ayuntamiento de Playa del Carmen utiliza un caso sensible —el rescate de una joven víctima de secuestro— para promover la figura de la presidenta municipal, Estefanía Mercado. El comunicado, titulado “Estefanía Mercado responde con hechos: rescatan a mujer joven víctima de secuestro en Playa del Carmen”, pone el nombre de la presidenta como eje central, atribuyéndole directamente el éxito de un operativo llevado a cabo por la Secretaría de Seguridad Ciudadana Municipal (SSCM).
Según el texto, el rescate se logró “gracias a la inversión histórica impulsada por el gobierno de la presidenta municipal Estefanía Mercado en capacitación, equipamiento y patrullaje estratégico”.
Si bien el boletín detalla que el operativo ocurrió tras un reporte recibido durante un patrullaje en la intersección de Avenida Universidades con Libramiento Cristo Rey, donde policías interceptaron un vehículo Nissan Tsuru blanco y detuvieron al presunto responsable, identificado como Jerry Ismael “N”, el enfoque no se centra en la labor institucional ni en la víctima, sino en ensalzar la gestión de Estefanía Mercado.
El texto llega a vincular el caso con “los gobiernos de la Cuarta Transformación”, sugiriendo un logro político en un contexto que, podría manejarse con sobriedad, dado lo sensible del caso, tratándose de una mujer que fue víctima de la delincuencia que persiste en el municipio que la alcaldesa afirma es seguro, lo que parece un contrasentido.
El boletín, alojado en el sitio oficial del Ayuntamiento (playadelcarmen.gob.mx), también menciona la atención brindada a la joven por el Grupo Especializado de Atención a la Violencia Familiar y de Género (GEAVIG), pero este detalle queda opacado por el tono triunfalista que prioriza la figura de la presidenta sobre la gravedad del caso.
Este uso de un caso sensible para la autopromoción de Estefanía Mercado reaviva el debate sobre los límites éticos en la comunicación gubernamental, especialmente cuando se trata de temas que involucran la seguridad y el bienestar de las personas.